Un individuo ideó un plan para eludir su responsabilidad de pagar la manutención de sus hijos a su exesposa, simulando su propia muerte y enfrentando posteriormente las consecuencias legales de sus acciones ante un tribunal en EE.UU.
Jesse Kipf, de 39 años, acumulaba una deuda de más de 116.000 dólares en concepto de manutención. Admitió haber cometido los delitos de fraude electrónico y usurpación de identidad.
Todo comenzó a principios de 2023, cuando accedió al sistema de registro de defunciones de Hawái y se hizo pasar por un médico de otro estado para crear y validar un certificado de defunción a su nombre. Utilizando una firma digital, el nombre y la licencia médica de otro individuo, logró que su supuesta muerte fuera registrada en numerosas bases de datos gubernamentales. Además, hackeó los sistemas de varias empresas privadas y de los gobiernos de Arizona y Vermont para figurar como fallecido en sus registros.
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No obstante, las autoridades descubrieron que también había accedido a información privada y había intentado vender acceso a estas redes en línea.
Kipf enfrentó un juicio en noviembre de 2023, donde fue acusado de robo de identidad, fraude informático y declaraciones falsas a instituciones financieras. Originalmente, enfrentaba una posible condena de más de 60 años de prisión. Sin embargo, tras llegar a un acuerdo y confesar sus crímenes, aceptó una sentencia reducida de siete años al admitir los cargos en su contra.
Además de asumir la deuda de manutención de sus hijos, se comprometió a pagar 195.000 dólares en daños y perjuicios a las entidades perjudicadas por sus acciones. Además, podría enfrentar una multa adicional de aproximadamente 500.000 dólares.
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Actualmente, aguarda su sentencia, mientras su caso ha generado gran repercusión en las redes sociales y ha provocado una variedad de comentarios por parte del público.
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